Susanna Griso está de actualidad por haber conseguido el Premio Ondas como Mejor Presentadora. Recibirá el testigo de Jorge Javier Vázquez, que hace un año fue muy criticado por haber sido el elegido, algo que Griso no comparte y por eso ha querido defender al periodista.
La presentadora también ha querido explicar cómo está viviendo está nueva temporada al frente de 'Espejo público', y ha destacado el Observatorio económico entre las novedades por estar tan pegado a la actualidad. Asegura además que, aunque es la sección que menos conoce, le gusta cuando hablan de corazón y se siente "como una telespectadora".
Te acaban de entregar el Premio Ondas por ser la Mejor Presentadora. ¿Contenta?
Todavía no lo he recibido, lo haré el próximo viernes en Barcelona, mi ciudad. Será en el Liceo, y me hace especial ilusión el lugar porque soy muy aficionada a la ópera. Se dan todos los ingredientes para que sea un momento inolvidable.
¿A quién llamaste primero cuando te comunicaron que habías recibido el premio?
Me lo filtró antes de que se hiciera público una persona que no pudo desvelar. Me quedé muy sorprendida y pensando durante un buen rato. Me ocurrió algo parecido a lo de Vargas Llosa cuando le dieron el Nobel, que creía que le estaban tomando el pelo. Como se suponía que yo no podía decir nada, le envié un mensaje a mi marido para que pusiera la SER. Me enteré muy poco antes de que se hiciera público. A partir de ahí, empecé a recibir llamadas de compañeros.
¿Qué supone que en esta ocasión el premio no sea para el programa sino para la presentadora?
Lo siento como si fuera también para el programa. Me hace mucha ilusión que destaquen mi tarea como profesional, mi buen hacer, pero cuando dicen que he sabido conjugar el rigor con la naturalidad y el entretenimiento con la información, no creo que se refieran sólo a mí. El mérito es compartido con toda la gente que hace eso posible.
Somos un equipo que venimos todos de informativos, salvo alguna excepción. A priori, la gente piensa que no vamos a poder con el entretenimiento y nos ven casi como unos intrusos. Me congratula haber demostrado que sí se puede siendo tan sosos como dicen que somos los de informativos (risas).
Recoges el testigo de Jorge Javier Vázquez. Tras la polémica que se armó el año pasado, ¿crees que él lo merecía?
Jorge Javier fue una de las personas que me llamó para felicitarme. Me comentó que para él fue una alegría enorme, casi un sueño hecho realidad, pero que le quedó un regusto amargo por todo lo que vino después. A mí esa polémica me pareció un poco absurda porque te puede gustar o no el tipo de televisión que él hace, pero es indudable que es el mejor domador de ese circo de cuatro pistas. Los méritos de Jorge Javier a la hora de presentar me parecen incuestionables.
Continuáis como segundo magacín más visto de la mañana esta temporada en 'Espejo público'. ¿Cómo estás viviendo todos los cambios que está habiendo?
Este año ha sido caótico. El tema de la TDT nos ha llevado a dar muchos tumbos y ha sido un año muy convulso. La mañana además es muy competitiva y la pasada temporada ya vivió muchos cambios. 'El programa de Ana Rosa' adelantó su horario y Televisión Española cambió su magacín, pero hemos aguantado y yo estoy muy satisfecha con los resultados.
A priori, pensaba que íbamos a sufrir más la fragmentación. Ha habido más competencia y los nuevos canales nos afectan, especialmente en días festivos. Cuando llegan las vacaciones escolares, nuestro programa baja porque es muy informativo y contra 'Bob Esponja' no hay nada que hacer (risas). La rivalidad me viene más con él que con cualquiera de las otras reinas de las mañanas.
En el inicio de esta temporada hiciste unas declaraciones en las que decías que iba a ser la temporada definitiva. ¿Te acuerdas a lo que te referías exactamente?
Yo todo me lo planteo como definitivo porque le pongo mucha pasión a todo y necesito pensar que siempre va a ser distinto. No creo en las temporadas de trámite. Esta temporada me ha ayudado porque hemos cambiado de plató, tenemos nuevos colaboradores y nuevas secciones. El programa se ha renovado mucho.
Es definitiva porque hacemos una apuesta por la información más ágil y amena con un plató mucho más abierto que me permite pasearme más que antes. Es una nueva vuelta de tuerca respecto a lo que ya hicimos cuando arrancó 'Espejo público'. Suprimimos la mesa política tradicional e intentamos hacer algo mucho más ágil. Estoy francamente satisfecha con los cambios.
Hablabas del cambio de plató. ¿A una le piden su opinión antes de realizar cualquier modificación?
Sí. Siempre te llevas sorpresas porque tú tienes una idea teórica que comunicas a las personas que tienen que poner en marcha todos esos cambios y la realización suele variar. Una de las demandas que les hice es que quería estar más de pie porque me gustar estar así, como estoy ahora. Debe de ser porque me he pasado muchos años sentada detrás de una mesa. Como mucho, me gusta estar en un taburete. Así puedo acercarme más al público o a una pantalla. Por mí, les tendría a todos de pie o en taburetes (risas).
Esta temporada también habéis sumado el Observatorio económico. ¿Qué balance haces de este inicio?
Estoy muy satisfecha porque tenemos a cuatro ex ministros muy respetados. La información económica no deja de ser dura. He hecho economía durante muchos años y me gusta, pero también es evidente que hay demanda y el tema interesa. Hemos tenido recientemente a Josep Piqué o Jordi Sevilla y hablamos de temas muy actuales como la deuda irlandesa, la deuda española, si se tiene que rescatar o no a Dublín, del G20, etc.
¿Qué te gustaría arrebatar a tus competidoras? ¿Te gustaría la falta de publicidad que tiene Mariló Montero o contenidos tan potentes para comentar como los de 'Gran hermano' como hace Ana Rosa Quintana?
Sería plantearme otro tipo de trabajo y de cadena. La publicidad la tengo que reconocer como parte de mi trabajo. Tengo los medios que tengo gracias a eso porque es lo que financia mi formato. Nos tenemos que llevar bien por eso, y estamos condenados a asumirla.
Respecto a lo de 'Gran hermano', son cadenas distintas Antena 3 y Telecinco. Mientras Telecinco ha apostado por los realitys, Antena 3 se ha centrado más en las historias. No quiero aspirar a algo que mi cadena no tiene. Trabajo otro tipo de contenidos.
Ana Rosa y Mariló siempre han dicho que tienen muy buena relación entre ellas. ¿Pasa lo mismo contigo?
Sin duda, quedamos habitualmente las cuatro (Ana Rosa Quintana, Mariló Montero y Concha García Campoy) a comer y a hablar de nuestras cosas, no de trabajo. Todas me han felicitado.
Esta temporada se ha levantado cierto revuelo con los invitados de la tertulia taurina después de que se comprobara que son habituales del mundo de la televisión.
No son actores ni habituales de la televisión. Yo no estoy directamente implicada en esa sección porque sólo soy el hilo conductor. Se hablaron de los encierros porque este verano ha habido bastantes cogidas. Nosotros tenemos siempre cuatro o cinco testimonios relacionados con el tema y entre el público pedimos opinión. Esta gente forma parte de nuestra comunidad y vienen frecuentemente.
En los últimos años se ha contratado a gente que en principio no pertenece al mundo de la televisión, como puede ser el caso de Jesús Neira en 'Espejo público'. ¿Cómo ves este tipo de colaboraciones?
Creo que es bueno contratar a gente que no tenga nada que ver con el medio. Su mirada puede ser más limpia que la nuestra. A Jesús Neira se le incluyó en el programa para hablar, entre otras cosas, de la violencia machista. También ocurre lo mismo con Isabel Sartorius, que nos propuso tener su propia sección de autoayuda, tema que ella conoce.
Te ha tocado hacer corazón en 'Espejo público'. ¿Seguías este tipo de informaciones? ¿Te sientes a gusto?
Es la sección que menos seguía de las que tenemos y en la que estaba menos informada. Luego me ha transmitido mucho porque me he podido tomar un respiro y reirme. También es donde participo menos en su elaboración porque normalmente toda la información del corazón se gesta cuando yo ya estoy en pantalla. Se reúnen a las 9 de la mañana, y yo ya estoy en harina, así que me pongo un poco de telespectadora y quiero que me cuenten.
Has trabajado con profesionales de la talla de Matías Prats y ahora estás con otros más polémicos como Jesús Mariñas o Massiel. ¿Qué tiene de bueno y de malo trabajar con cada uno de ellos?
Matías Prats es un gran amigo y compañero. Es una de las personas que más quiero en esta profesión. Es un referente al que siempre consulto cuando tengo que dar un paso en cualquier sentido. Jesús Mariñas y Massiel me han sorprendido positivamente porque ambos tienen mucho sentido de la televisión, del espectáculo y el entretenimiento. Hay momentos en que riño a Massiel, pero también me anima mucho cuando se pone a cantar o se marcha un zapateado.
Estuviste en informativos y ahora llevas un tiempo alejada y más centrada en el entretenimiento. ¿En cuál de los dos formatos te sientes más cómoda?
Son muy distintos. Ahora me siento muy cómoda con lo que hago, y posiblemente si volviese a presentar un informativo me sentiría constreñida porque me faltaría tiempo para explayarme. Ahora tengo cuatro horas para contar historias y allí tenía media hora. No descarto volver a informativos porque es un género que me encanta. Desde que empecé, me han ofrecido muchas cosas y siempre he sido fiel a ese formato. Posiblemente, lo que estoy haciendo ahora es lo más parecido a presentar un informativo sin estar en la edición de las 3 o de las 9 de la noche.
¿Te ves mucho tiempo presentando 'Espejo público?
Prefiero no hacer planes. En esta profesión, te das cuenta de que normalmente las cosas pasan mientras tú haces planes. Me parece un poco absurdo planificar a medio o largo plazo. Me pongo una temporada por delante y aspiro a dar ahora todo lo posible.
Se te ha imitado en varias ocasiones en algunos programas como 'Homo Zapping'. ¿Cómo lo llevas?
Lo llevo bien, pero siempre estoy por detrás de Matías Prats en este tema, que es una de las personas más imitadas de este país. Al final, cuando la gente piensa en alguna de sus últimas parejas de informativos, se acuerdan de todo el tiempo que estuvimos juntos trabajando. Siempre estoy ahí como replica de Matías y lo sobrellevo con humor.
Soraya García
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